“Ver a San Alfonso destruido, era ver la ciudad destruida”

El Padre Benito Tapia, párroco de la Iglesia de
San Alfonso conversó con Cauquenesnet.com .

Hace poco más de una semana, fue la entrega de las obras finalizadas del Templo de San Alfonso,  luego de una restauración profunda que incluyó la reconstrucción de sus torres históricas, la demolición parcial de su módulo principal y la reparación estructural del resto del edificio. La remozada Parroquia ahora espera -en la segunda quincena de mayo- bendecir y consagrar su altar para volver a celebrar la Santa Misa.

Uno de los testigos privilegiados de este proceso fue el padre Benito Tapia, sacerdote redentorista, que llegó a Cauquenes en febrero de 2011 como párroco del destruido templo, para hacerse cargo de la reconstrucción del mismo y del resto de las dependencias de la comunidad.

El viernes 12 de abril el párroco, junto al presidente Sebastián Piñera, descubrió la placa conmemorativa de entrega oficial del edificio. Era el cierre de un proceso que duró más de tres años, que tuvo de dulce y de agraz y que si bien,  no vivió desde el minuto cero, pues para el 27 de febrero de 2010 se encontraba en Santiago -en la Basílica del Perpetuo Socorro-, hoy, ya empapado del sentir local, conversa con Cauquenesnet.com y nos entrega el testimonio de su arribo a una comunidad herida y triste por lo sucedido, y lo que significa que la Iglesia de San Alfonso -hermosa e imponente- vuelva a acoger a sus fieles.

¿Usted no estaba en Cauquenes para la época del terremoto, verdad?
-No, yo estaba en la Basílica del Perpetuo Socorro en Santiago, la que también sufrió bastantes daños con el Terremoto, la cual todavía no se puede arreglar porque es mucho el daño y el dinero que se necesita para arreglarla y en febrero de 2011 a mí me enviaron para acá, para Cauquenes como párroco y –también- haciéndome cargo de todo lo que era la reconstrucción tanto del templo parroquial, como de las dependencias de la comunidad.

¿Cuál fue el panorama que usted encontró acá en Cauquenes al llegar?
-Desastre total. Era deprimente. Yo creo que el templo San Alfonso expresaba todo el desastre que había en la ciudad. Era como un símbolo de toda la herida que había aquí, tanto a nivel de la comunidad de Cauquenes y como la desesperanza con toda una historia en el suelo. Yo creo que eso afectó mucho a la gente…

Esta es una ciudad que tiene muchos años y San Alfonso es uno de los pocos vestigios que Cauquenes tiene de ellos…
-Claro, y en la ciudad de Cauquenes, uno de los símbolos es San Alfonso. Todo el mundo habla de San Alfonso. Es un patrimonio de la ciudad, entonces ver a San Alfonso destruido era ver a la ciudad destruida, y si no se arreglaba el Templo de San Alfonso, era como el fantasma que estaba ahí; La ciudad no se ha reconstruido. Yo creo que ese era el concepto que estaba en la gente.

¿Cuál era la visión de la comunidad de San Alfonso, de la gente que venía a misa acá, de ver su templo casi en el suelo?
-A ver, en un primer momento yo creo que a la gente le afectó mucho. Era la casa común y que estuviera en el suelo… Ese templo bonito, con el que ellos se identificaban… (De ahí) A llegar a hacer todas sus celebraciones de fe a un galpón de lata con las mínimas comodidades, pese a que nos ha servido mucho -hasta el día de hoy- para que la gente pueda manifestar y vivir su fe. Pero, llegar a ese extremo, fue un quiebre fuerte para la gente. Muy doloroso, y fíjate, yo he compartido mucho con familias, a las que se les calló su casa y quedaron con su casa literalmente en el suelo y que fue doloroso para ellos, pero a mí me daban a entender que para ellos fue más doloroso ver a San Alfonso como quedó, porque era la casa de todos y ver las condiciones en que quedó y que nunca más se iba a poder ocupar. Ver en un momento en que casi se decidió que el templo se iba a demoler por completo y a quedar tabla rasa el piso, yo creo que eso le afectó mucho a la gente. Porque la gente se siente identificada con san Alfonso.

Y este proceso de reconstrucción del templo: Cómo recibieron la noticia que les llegarían recursos regionales?
-En primer momento fue de euforia, alegría, porque se abría la posibilidad de un proyecto. Pero la gente pensaba que se aprobaba el proyecto y mañana ya iban a estar las maquinarias trabajando acá. De repente se fue viendo que este era un largo proceso de mucha cosa, de ver que así como habían avances, también habían retrocesos, eso fue como desilusionando a la gente y decía ‘No, no, no lo vamos a ver arreglado’, y la gente mayor era la que más sufría porque decía ‘Yo me voy a morir y no voy a ver el templo reparado’, y yo creo que con muchos pasó eso, se murieron y no vieron su templo reparado, porque nunca pensaron que esto iba a ser a muy largo plazo y yo siempre he dicho: El colúo siempre va a meter la cola para que estos proyectos de Dios se hagan más complicados.

Un largo peregrinar…
-Claro, se tuvo que luchar mucho, se tuvo que defender mucho la posibilidad del templo, porque había que buscar una figura creíble y con razón del templo, para que pudiese el Estado contribuir con los fondos que se necesitaban. No por ser el templo San Alfonso no más se iba a reconstruir con dineros estatales. Tenía que tener una figura importante. Y al final se logró, pero para la conciencia de la gente, para la retina de la gente, es que el templo de San Alfonso pasa a ser patrimonio histórico de la ciudad. Con esa figura se inició de manera más fuerte todo este proyecto de la reconstrucción de San Alfonso. Y –como yo digo- el colúo mete la cola por ahí, llegó el momento en que se dijo perfecto: Un edificio –porque se habla de edificio- histórico de la ciudad, tiene que estar construido en un territorio que sea patrimonio histórico. Y San Alfonso estaba acá y el lugar de patrimonio histórico de Cauquenes estaba allá abajo donde estaba la Plaza Vieja –o sea unos cuantos kilómetros- y ahí se tuvo que defender mucho, porque ahí casi se dio por perdido el proyecto. Pero gracias a Dios se logró y después de dos años de trámites para arriba y para abajo comenzó…

Una reparación profunda

Las obras en la tradicional iglesia fueron realizadas con recursos provenientes del Gobierno Regional del Maule. Trabajos que no corresponden a una reconstrucción, pues como el padre  Benito Tapia bien lo explica; “El proyecto es de reparación profunda (…) Porque si tú estás hablando de reconstrucción, primero hay una mayor intervención en lo que es el edificio como tal, y también una ‘porrá’ de millones más. No hay que dejar de considerar que esto de la reparación profunda del templo de San Alfonso son 850 millones de pesos. Es mucha plata, y es mucha plata que la comunidad no tenía. Ni la comunidad de los sacerdotes y menos la comunidad laical”.

Desde el punto de vista técnico se asegura que este templo cuente con las características para soportar otra situación de emergencia?

-Con un cataclismo como el que hubo, cualquier edificio se va a caer nuevamente, pero sí se hizo uso de todas las tecnologías más modernas para reforzar, considerando que se está reparando un edificio antiguo y dentro de ese contexto se usaron todas las tecnologías para reforzar con muros de hormigón muy sólidos y darles, por supuesto, una seguridad y estabilidad al templo pensando en que va a cobijar mucha gente.

Desde el punto de vista estético se vuelve al diseño más clásico…
-Y ese fue uno de los requisitos para adjudicarnos el proyecto, porque si es un edificio histórico, un patrimonio histórico, tenía que imperar la figura histórica del templo y eso costó un poquito que entendiera la comunidad, porque la comunidad tenía el concepto de las torres medias redonditas, porque claro esas fueron las típicas soluciones que uno dice esto lo vamos a poner provisorio, por mientras, hasta cuando se hagan y quedan en el tiempo, y esa fue la solución de esas torres medias redonditas, que fue por allá por los años ’60, pero el original, original del templo eran este tipo de torres. Así se construyó y el terremoto de 1939 las echó abajo, pero esa era la idea, recuperar lo que más se pudiera de la construcción original del templo.

¿Cuándo se oficiará la primera misa en la restaurada iglesia?
– Nosotros como comunidad cristiana, como comunidad religiosa vamos a tener una celebración muy importante que es la bendición del templo y la consagración del altar, porque no hay que olvidar que el templo fue intervenido, hubo maquinaria, todo. Y por lo que significa el templo parroquial, por lo que significa un altar, hay una celebración, hay una bendición especial y de consagración del altar para ahí recién celebrar la primera misa. Y eso va a ser el 19 de mayo con la presencia del Superior General de los Padres Redentorista, quien viene exclusivamente desde Roma a esta celebración y con la presencia del señor obispo, Monseñor Tomislav Koljatic, quien es el encargado de bendecir, consagrar este nuevo templo.

¿Cómo participaron los fieles del proceso?

– Quiero agregar la importancia de la participación de la gente en el proceso de la restauración. Nosotros pensamos: la gente va a preguntar nosotros en qué podemos ayudar. En lo que era el edificio mismo; difícil que ellos ayudaran porque económicamente estaba todo financiado…

Y en qué ayudaron?
-Dijimos casa nueva, muebles nuevos e hicimos una campaña para construir las bancas nuevas. Que la gente se comprometiera y dijera gracias a nosotros el templo nuevo, tiene bancas nuevas. Había que mandar a construir 92 bancas en raulí, en el estilo y forma de las bancas originales, que eso no deja de ser plata y la gente participó e hicimos una campaña de una gran rifa… De una muy buena rifa, pero la gente se comprometió de tal manera –oye- que cuando hicimos el sorteo de la rifa, que lo hicimos en público acá adentro de ese patio que tú ves allá, estaba atestado de gente. No cabía más gente y la gente acá afuera peleando por más números de rifa porque querían ayudar. Estaban todas las rifas vendidas y fue una fiesta muy linda, la gente se notaba que estaba contenta porque estaban cooperando y gracias a esa campaña tenemos las bancas nuevas para el templo.

Cómo parroquia tienen contemplado actividades especiales referente a la reapertura del templo?
-Exactamente. Nosotros queremos que esa semana quede marcada como un acto cultural durante la semana, mostrando diferentes aspectos musicales, tanto del folclor, como de conciertos, y justamente esta semana nos vamos a reunir para tirar líneas de qué va a ser esa semana hasta el 19 de mayo.

Va ser una fiesta cristiana…
-Va ser una fiesta cristiana, y mostrando no solamente lo religioso, sino que también las dotes que tenemos aquí en Cauquenes.

Una muestra de cómo se relaciona San Alfonso con la comunidad…

-Claro, exactamente… y que bueno lo que dices tú, de cómo se relaciona San Alfonso con la comunidad, porque ya hay una expresión visible de este San Alfonso que era todo cerradito y que la comunidad para ingresar al templo tenía que pasar un reja y pasar al templo, ahora, ese mismo concepto cambió. Ya no está la reja de delante, sino que San Alfonso se comunica directamente con la comunidad. Entonces está ese concepto de cómo unir cada vez más la fe con la vida cotidiana de la gente… Aquí yo creo que hay que rescatar, hay buenos artistas de la zona y del mismo Cauquenes. Hay una señorita muy famosa del arpa, hay un joven que toca el piano precioso. Hacer una semana realmente cultural y mostrando, insisto, las dotes que tiene Cauquenes, unido a esto maravilloso que es el templo de San Alfonso.

Por: Patricio Alexis Díaz E.

4 comentarios

  1. QUE HERMOSA SE VE LA CATEDRAL,Y APROVECHO DE HACER UN LLAMADO A TODOS LOS CAUQUENINOS NO RAYARLA ,MUY PRONTO IRE POR ALLA A VISITARLA SE VE MUY HERMOSA VIVA CAUQUENES …….DESDE AQUI SANTIAGO DE CHILE UNA CAUQUENINA MAS

    Me gusta

  2. Un saludo muy especial para el Padre Benito Tapia. Lo conocimos a él y sus compañeros seminaristas, (José y Julio), con mis hijas Liliana y Maritza, cuando asistíamos a misa con el Padre Félix Q.E.P.D. Saludos desde La Serena. Felicitaciones por todas las gestiones realizadas, en la Iglesia de Cauquenes.

    Me gusta

Replica a Anónimo Cancelar la respuesta