Desde tempranas horas del sábado una sensación distinta reinaba en el ambiente de las comunas de la Provincia de Cauquenes, era inevitable no recordar lo sucedido hace un año atrás, era imposible que cada persona no reviviera en sus mentes, minuto a minuto, segundo a segundo, lo que hacía previo a las 3:34 horas de ese 27 de febrero de 2010.
Mientras se acercaba la hora en que -hace un año atrás- ocurrió el terremoto de 8,8 grados Richter, los Bomberos de Cauquenes expusieron a la comunidad una serie de ejercicios de rescate, en los cuales se han estado capacitando para enfrentar situaciones de crisis. Finalizada la actividad de los voluntarios locales, comenzó un acto artístico-cultural en donde la música y la poesía continuó rindiendo homenaje a las víctimas.
En el sector costero, en la Playa de Curanipe, el recuerdo fue más íntimo. Funcionarios de la municipalidad de Peñalolén -comuna que desde el primer momento de la catástrofe brindó ayuda a esta zona- junto a habitantes de Pelluhue y Curanipe, en un círculo a orillas de ese mar que hace un año arrebató la vida de hombres, mujeres y niños, compartieron vivencias y experiencias y rindieron un sincero homenaje a los que ya no están.
Otros, premunidos de velas, decidieron esperar la hora del triste suceso en los memoriales construidos por el arquitecto y artista, Claudio Di Girolamo, inaugurados el 28 de diciembre pasado.
La agenda conmemorativa continuó el domingo. Por la tarde -cerca de las 14:00 horas- el Presidente Sebastián Piñera llegó hasta Curanipe, lugar en el cual depositó una ofrenda floral en el memorial en recuerdo de las víctimas del tsunami que arrasó con el borde costero de Pelluhue. Luego se trasladó hasta la casa de Luis Pavez, el primer habitante de esa comuna que obtuvo una vivienda definitiva en la etapa de reconstrucción.
Domingo de música al corazón
Son las 20 horas del domingo y en Cauquenes, los actos conmemorativos continuaban en un escenario montado en el kiosco de la plaza de Armas Bernardo O’Higgins, lugar en el que se llevó a cabo una liturgia ecuménica, a cargo de la comunidad de la Iglesia de San Pedro y organizaciones sociales, la que finalizaría con un gran concierto. La Actividad contó con el apoyo de la Senadora Ximena Rincón y el Grupo Minero Antofagasta Minerals.
Finalizada la ceremonia ecuménica, a eso de las 21:30 horas, suben hasta el escenario de la Plaza de Armas el grupo Natalino, quienes brindaron un recital cargado de romanticismo, dedicado para los cientos de cauqueninos que se congregaron en el principal punto de reunión de la ciudad, habitantes que hace un año atrás lloraban producto del quinto terremoto más fuerte del mundo y que ahora tenían la posibilidad de abrazarse y tomarse de las manos, dejando atrás el dolor de un triste 27 de febrero que nos cambió en algo la vida a todos.
Ya al mediodía de este sábado 26, en la Iglesia de San Pedro -frente a la Plaza de Armas de Cauqeunes- el Obispo de la Arquidiócesis de Linares, Tomislav Koljatic, presidió una eucaristía conmemorativa del fatídico movimiento telúrico que afectó a la zona y que provocó que cientos de familias cauqueninas quedaran con sus viviendas destruidas o a muy mal traer.
A las 21 horas, en la cancha de San Alfonso -frente a la parroquia del mismo nombre que resultó con daños de consideración, por lo cual aún no ha vuelto a funcionar- se realizó otra misa en recuerdo del terremoto. Mientras tanto, en la Plaza de Armas más cauqueninos se congregaban para esperar en vigilia las 3:34 de la madrugada.
Mientras se acercaba la hora en que -hace un año atrás- ocurrió el terremoto de 8,8 grados Richter, los Bomberos de Cauquenes expusieron a la comunidad una serie de ejercicios de rescate, en los cuales se han estado capacitando para enfrentar situaciones de crisis. Finalizada la actividad de los voluntarios locales, comenzó un acto artístico-cultural en donde la música y la poesía continuó rindiendo homenaje a las víctimas.Cerca de las 3:15 de la madrugada comenzó la liturgia del fuego, mientras tanto se confeccionaba una gran bandera chilena con flores que los asistentes al acto fueron colocando en un panel. A las 3 de la madrugada con 34 minutos, momento exacto en que se conmemoraba el primer aniversario de la tragedia, la emoción y el recuerdo se hizo evidente.
A orillas del mar
En el sector costero, en la Playa de Curanipe, el recuerdo fue más íntimo. Funcionarios de la municipalidad de Peñalolén -comuna que desde el primer momento de la catástrofe brindó ayuda a esta zona- junto a habitantes de Pelluhue y Curanipe, en un círculo a orillas de ese mar que hace un año arrebató la vida de hombres, mujeres y niños, compartieron vivencias y experiencias y rindieron un sincero homenaje a los que ya no están.
Otros, premunidos de velas, decidieron esperar la hora del triste suceso en los memoriales construidos por el arquitecto y artista, Claudio Di Girolamo, inaugurados el 28 de diciembre pasado.Mientras tanto, a la misma hora, una eucaristía se llevaba a cabo en la Plaza de Curanipe, ceremonia que se replicó al mediodía del sábado en la Plaza de Pelluhue y a las 5 de la tarde en el Camping de Curanipe, lugar en el que la gran ola sorprendió a decenas de familias que pernoctaban allí.
Cuando el reloj marcaba las 19:00 horas, se realizó un responso en el memorial ubicado a un costado de la playa principal de Curanipe, finalizando la jornada de actividades, a eso de las 22:30 horas, con un nuevo responso, esta vez, en el memorial de Pelluhue.
La agenda conmemorativa continuó el domingo. Por la tarde -cerca de las 14:00 horas- el Presidente Sebastián Piñera llegó hasta Curanipe, lugar en el cual depositó una ofrenda floral en el memorial en recuerdo de las víctimas del tsunami que arrasó con el borde costero de Pelluhue. Luego se trasladó hasta la casa de Luis Pavez, el primer habitante de esa comuna que obtuvo una vivienda definitiva en la etapa de reconstrucción.
Domingo de música al corazón
Son las 20 horas del domingo y en Cauquenes, los actos conmemorativos continuaban en un escenario montado en el kiosco de la plaza de Armas Bernardo O’Higgins, lugar en el que se llevó a cabo una liturgia ecuménica, a cargo de la comunidad de la Iglesia de San Pedro y organizaciones sociales, la que finalizaría con un gran concierto. La Actividad contó con el apoyo de la Senadora Ximena Rincón y el Grupo Minero Antofagasta Minerals.
La parlamentaria por Maule Sur -quien tuvo una activa participación junto a la comunidad- señaló a la agencia UPI, que en el evento además se hizo entrega de árboles nativos.
Finalizada la ceremonia ecuménica, a eso de las 21:30 horas, suben hasta el escenario de la Plaza de Armas el grupo Natalino, quienes brindaron un recital cargado de romanticismo, dedicado para los cientos de cauqueninos que se congregaron en el principal punto de reunión de la ciudad, habitantes que hace un año atrás lloraban producto del quinto terremoto más fuerte del mundo y que ahora tenían la posibilidad de abrazarse y tomarse de las manos, dejando atrás el dolor de un triste 27 de febrero que nos cambió en algo la vida a todos.Por: Patricio Alexis Díaz
Cauquenesnet.com

