Los delincuentes se hacen pasar por familiares o amigos y le piden a la víctima que deposite una suma de dinero –que va entre 200 mil a 900 mil pesos- para eludir la acción de la justicia.
Un total de 23 casos de estafas telefónicas, con montos que van entre los 200 mil y los 900 mil pesos, han llegado a manos de las Fiscalías en la Región del Maule en lo que va del año 2009. De hecho, esta mañana se recibió la última denuncia de este tipo en la Fiscalía Local de Cauquenes, lo que constituye el primer caso que llega a conocimiento de la Fiscalía.
Es por lo anterior que esta mañana el Fiscal Regional, Juan Pablo Kinast, formuló un llamado a la comunidad a no caer en la trampa de los delincuentes.
La autoridad explicó que los delincuentes realizan un llamado telefónico a la víctima informándole que algún pariente ha tenido participación en un accidente de tránsito y con el objeto de evitar que él responda ante la justicia, por las eventuales consecuencias que fluyen de ese hecho, le solicitan hacer un depósito de dinero a favor del afectado. “Los montos van entre 200 mil y 900 mil pesos. No son cantidades menores. En los últimos 30 días hemos recibido 22 denuncias, es decir, es casi un caso diario y de ahí la necesidad de alertar a la comunidad de que se trata de un hecho irregular”, dijo el Fiscal Regional.
En ocasiones los delincuentes tienen variada información familiar de la víctima, pero también hay casos en los que, aprovechándose de su candidez, van extrayendo información de las propias palabras de la víctima, como nombres, lugares, etc. El Fiscal Regional, Juan Pablo Kinast, relevó la importancia de denunciar a tiempo los casos, ya que la alerta temprana permite un mejor resultado en las investigaciones.
