La autoridad regional llegó hasta el Hospital de Curicó para saber del estado de salud de la mujer que recibió dos balazos de su conviviente, sobreviviendo de milagro, hecho ocurrido en Rauco.
La directora regional del Servicio Nacional de la Mujer, Claudia Quezada, manifestó su preocupación por el fenómeno que está siendo cada vez más repetitivo, tanto en la región del Maule, como en el resto del país, de que los autores de femicidios se suicidan tras consumar estos graves delitos.
En encuentro con periodistas, lamentó los hechos de Rauco, donde un joven de 22 años, identificado como Emilio Benjamín Bravo, extrae desde sus ropas un revolver calibre 22 para dispararle a su pareja Adriana Maribel González, para luego suicidarse con un tiro en la cabeza, pero la víctima sobrevivió al grave ataque, por lo cual no se consumó el delito de femicidio, cuya lista de mujeres fallecidas suma 53 a nivel país y 6 en la Región del Maule.
Como se sabe, el hecho de Rauco ocurrió en la casa número 96 de la calle cuatro en la villa San Sebastuián, distante a 10 kilómetros de Curicó, domicilio al que tenía prohibición de acercarse, por orden del Tribunal de Garantía de Curicó, ya que en marzo de este año la misma víctima presentó en su contra una denuncia por lesiones en violencia intrafamiliar.
En el domicilio –a eso de las once de la noche del lunes 6 de octubre- se desencadenó una violenta discusión aparentemente por celos enfermizos que afectaban a Emilio Bravo, hecho que no tardaría en terminar en tragedia. Uno de los proyectiles le dio en la mano a la víctima, mientras que el otro en la zona abdominal, resultando Maribel González con lesiones graves que hicieron pensar inicialmente al hombre que ella había muerto. Con el arma en sus manos, Bravo salió de la casa y a escasos metros de distancia, se disparó un balazo en la cabeza en plena calle.
Preocupantes suicidios
Frente a este caso de Rauco y otros que se han suscitado en la región, con las mismas características, la Directora regional de SERNAM, Claudia Quezada manifestó su preocupación por este fenómeno, donde los autores de femicidios se suicidan. Subrayó que de los seis casos de mujeres asesinadas en la región del Maule, en cuatro de estos delitos el responsable se mató tras asesinar a la víctima.
Al mismo tiempo, hizo un llamado a que, independiente de los problemas que tenga una pareja, hay que tratar de solucionarlos de alguna forma, “porque cuando se mata a la mujer y se suicida el hombre, las verdaderas víctimas son los hijos”, agregando que SERNAM REGIONAL ha realizado coordinaciones exitosas con el Servicio Nacional de Menores para “evitar que los niños sean sacados del ambiente familiar”.
Estado de la mujer herida
Frente al estado de salud de Maribel González, la directora regional, se trasladó hasta el hospital de Curicó, donde comprobó que ella aun se encuentra grave, pero estable, conciente y evolucionando bastante bien.
Por algunos minutos la paciente dialogó con la Directora regional del SERNAM, a quien relató que testigo presencial del parricidio frustrado era su hija de 16 años que sobrevivió también de milagro.

