#POLICIAL: El atentado ocurrido en abril contra un jefe de Gendarmería no fue un hecho aislado. Una investigación periodística reveló que funcionarios del penal Santiago 1 entregaron datos personales del oficial a internos vinculados al Tren de Aragua. La filtración permitió que tres hombres viajaran a Cauquenes, dispararan contra su casa y dejaran amenazas fúnebres.
El 4 de abril, tres ciudadanos venezolanos llegaron a Cauquenes tras arrendar un vehículo en Santiago. A las 22.30 horas se presentaron en la vivienda de un comandante de Gendarmería que se desempeña en el penal de Santiago 1, dejaron una corona de flores y una carta intimidatoria, además de efectuar diez disparos contra la puerta principal. Días después, la familia del funcionario recibió nuevos mensajes amenazantes.
La indagatoria estableció que la información utilizada en el ataque fue obtenida dentro del penal capitalino. En ese lugar, reclusos que se hacían llamar “Los Contra el Abuso” reunieron antecedentes del comandante a través de otros funcionarios de la institución. Con esos datos en mano, contactaron a los tres hombres que ejecutaron la acción en Cauquenes.
Los atacantes, de 18, 21 y 30 años, fueron detenidos el 15 de abril en Estación Central durante un operativo de la Policía de Investigaciones y la Fiscalía Metropolitana Occidente. En la audiencia de formalización se los vinculó al Tren de Aragua y se les imputaron cargos por homicidio frustrado, porte ilegal de armas de fuego y asociación ilícita.
Una red interna al servicio del crimen organizado
El exdirector nacional de Gendarmería, Christian Alveal, alertó -en una entrevista con el medio Ciper– que la infiltración del crimen organizado en las cárceles es una señal temprana de su consolidación. “Cuando la corrupción se detecta en el sistema penitenciario, el fenómeno ya ha alcanzado cierto grado de control en espacios clave”, advirtió.
Alveal sostuvo que para enfrentar la crisis es necesario identificar y sancionar penalmente a los funcionarios que colaboren con bandas criminales. “Solo así se podrá proteger a quienes cumplen con su labor y restaurar la confianza en la institución”, concluyó.
