El fiscal de Cauquenes, Juan Pablo Pereira, ordenó exhumar el cuerpo de Hernán Canales, persona que murió luego de ser arrollado por el Jeep que conducía Martín Larraín Hurtado, hijo del senador y presidente de RN, Carlos Larraín, ocurrido la madrugada del 18 de septiembre.
Según lo publicado hoy por el diario electrónico Theclinic.cl, La decisión del perseguidor penal de la Séptima Región, es en respuesta a la petición del abogado querellante Gonzalo Bulnes, con el fin de reanalizar la autopsia que hizo el Servicio Médico Legal (SML) de la zona, que estableció que Canales falleció en menos de diez minutos luego de haber sido embestido por el Toyota amarillo 4X4 de propiedad del estudiante de Agronomía.
Hasta el momento se ha podido constatar que cerca de las 6:00 horas de la madrugada del 18 de septiembre, Larraín Hurtado arrolló a Canales, lanzándolo unos 16 metros más allá, quedando atrapado entre los alambres púas que separan la berma con los terrenos particulares adyacentes al camino. Luego de eso el primogénito del senador RN huyó del lugar -presumiblemente por encontrarse en estado de ebriedad y para evitar la alcoholemia- quedando allí dos de sus acompañantes, los que habrían urdido una mentira para impedir la acción de la justicia.
De acuerdo a lo señalado por el diario electrónico, «el informe del SML está construido sobre la base de apreciaciones legistas generales, sin particularizar si las lesiones de Canales fueron de carácter vital. Lo anterior apunta a dos temas centrales que pueden complicar la situación procesal de Larraín Hurtado. Sucede que el primer informe del SML sostiene que con las heridas producidas por el accidente sólo pudo haber sobrevivido poco más de 5 minutos. Sin embargo, en la última declaración de Larraín Hurtado, éste aseguro que estuvo cerca de 25 minutos con la víctima y que al huir del sitio del suceso Canales se encontraba con vida».
«El cruce no es menor»
De acuerdo a lo informado, la pericia realizada por el SML será contrastada con la de especialistas de los querellantes. El ex funcionario del servicio legista, Luis Ravanal, declaró a The Clinic: «Este cruce no es menor. Primero porque la fiscalía accedió a la exhumación y segundo porque se reanalizará la pericia que consta en la carpeta de investigación en busca de pruebas de que Canales murió por falta de ayuda».
El itinerario
Martín Larraín Hurtado, partió su itinerario de festejos dieciocheros desde Punta Arenas el 13 de septiembre pasando por Argentina y Temuco, antes de llegar a la zona de Cauquenes. En el trayecto -según The Clinic- Carabineros lo fiscalizó, pero no le pasó un parte ni le retiró el vehículo, pese a que viajaba con el permiso de circulación vencido.
A eso de las 19:00 horas del 17, el joven llegó a la casa de un amigo, donde se celebraba con asado y alcohol a destajo. Según su primera declaración, se tomó unos ponches, posteriormente a eso fue a las fondas con sus amigos y, una vez que terminaron, se subieron a la camioneta y comenzó a repartir a sus acompañantes en sus residencias.
Pero Larraín sólo alcanzó a dejar a un joven -apodado “cazuela”- en su domicilio. Posteriormente, en la zona de Curanipe, al tomar una curva arrolló a Hernán Canales. Allí, una de sus acompañantes, Sofía Gaete, le dijo que escapara. La razón que esgrimió fue que la familia de Larraín Hurtado era públicamente importante, tal como este último se lo declaró a la fiscalía el 10 de octubre pasado.
Posteriormente, Sofía Gaete y Sebastián Edwards, otro de los que iba en el jeep amarillo, se dirigieron a la comisaría de Curanipe. Allí contaron una versión distinta a la realidad y en la que aseguraban que el accidente lo protagonizó una camioneta blanca doble cabina. Lo insólito es que fuera del recinto Larraín Hurtado los esperaba en el mismo vehículo, mientras Hernán Canales yacía en el camino que unía las fondas con la unidad policial.
Posteriormente, Larraín Hurtado se fue con Edwards y Gaete a sus respectivas casas y siguieron «carreteando», tanto el 18 como el 19 de septiembre. Este último día, el hijo del presidente de RN, cargó sus maletas en el jeep y decidió emprender retorno a Santiago. Camino a la capital fue detenido en un control de Carbineros, los que ya alertados por la fuga del vehículo involucrado en el atropello, buscaban un motorizado amarillo, como el color de la pintura que había quedado esparcida en el lugar del accidente.
Detenido para el control y ante la evidencia de que su foco derecho estaba abollado, el hijo del Senador Carlos Larraín decidió contar la verdad. Fue detenido, llevado al retén, donde llamó a su padre y el fiscal le tomó declaración.
El 20 de septiembre, Martín Larraín Hurtado, fue formalizado por cuasidelito de homicidio, por no auxiliar a la víctima ni avisar a la autoridad. En tanto a sus amigos Sebastián Edwards y Sofía Gaete, se les formalizó por “obstrucción a la investigación”. Todos tienen prohibición de salir del país y comunicarse entre ellos.



