Evalúan potencialidades del cultivo del pistachero

Proyecto piloto, cofinanciado por FIA, investiga diferentes variedades de pistachos, para que el cultivo de este fruto pueda transformarse, a largo plazo, en una alternativa de negocio agrícola. En Cauquenes existen de este tipo de plantaciones como parte de dicha investigación.

La creciente demanda por pistachos en los mercados internacionales podría transformarse, a largo plazo, en una alternativa económica para la pequeña y mediana agricultura de secano, especialmente en las regiones del Maule y Bío-Bío.

Investigaciones han demostrado que el árbol del pistacho (pistachero) tiene buena adaptación a zonas de secano y de riego limitado. Sin embargo, también resulta evidente que si Chile quiere entrar en el mercado mundial del pistacho, deberá incrementar su producción, enfocándose en las variedades más demandadas y a la calidad del fruto.

Por estos motivos, el proyecto piloto “Evaluación y difusión del Pistacho en condiciones de secano o riego sub-óptimo, como alternativa económica y ambientalmente sustentable en el secano interior”, cuya ejecución está a cargo de la Municipalidad de San Javier, quiere evaluar la adaptación, productividad y rentabilidad de esta especie en los sistemas de producción locales, bajo diferentes climas, tipos suelos y condiciones de riego.

Para desarrollar el trabajo, junto con la empresa Consultorías Profesionales Agrarias y 8 agricultores, el municipio obtuvo cofinanciamiento de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA). Al mismo tiempo, la iniciativa quiere medir el impacto del cultivo laderas, como posible herramienta para la conservación de suelos. Esto significaría duplicar la superficie que podría ser plantada en el secano interior de las regiones del Maule y del Bío-Bío.

El proyecto piloto también propone identificar canales de comercialización estables para los pistachos producidos y difundir la experiencia como una propuesta económica y ambientalmente sustentable.

La ejecutiva de innovación de la Unidad de Programas y Proyectos de FIA, Paulina Erdmann, señaló que “es importante conocer más el comportamiento de las distintas variedades de pistachos, para establecer cuáles son las más indicadas para diferentes condiciones de suelo y clima”.

Pero hace unos días, los productores integrantes del proyecto piloto realizaron un día de campo para difundir los avances de su trabajo, la cosecha y el tostado de los primeros frutos. Mientras que en mayo próximo, estos agricultores efectuarán una gira tecnológica para conocer el manejo del cultivo del Pistachero en España (Ciudad Real), particularmente en zonas de secano. La idea es para analizar su implementación en los huertos establecidos en Chile.

Tropiezos y avances

De acuerdo al Boletín Técnico Nº 1 —editado en el marco del proyecto—, a diferencia de otros países de clima mediterráneo, hoy existen en Chile pocas plantaciones adultas de pistacheros, porque el cultivo de esta fruta se introdujo recién en la década de los ‘70. Además, su expansión ha sido lenta. Sin embargo, el texto señala que, en los últimos años, ha surgido interés por producir pistacho e, incluso, ya se han realizado nuevas plantaciones.

En general, éstas plantaciones son jóvenes —son menores a 15 años— y se localizan en las regiones Metropolitana (Colina), de O’Higgins, del Maule (Pencahue, Sagrada Familia, San Javier y Cauquenes) Al mismo tiempo, y a modo experimental, hay ejemplares en las regiones de Coquimbo y Bío-Bío (Ninhue y Portezuelo), además de Valparaíso (San Esteban).

Entre los obstáculos para ampliar el cultivo del pistacho en el país, se encuentran: la falta de información económica y técnica sobre experiencias chilenas; precios elevados de las plantas, lo cual hace difícil que los pequeños y medianos productores puedan adquirirlas, además de la difícil injertación y polinización. No obstante, según las evaluaciones, el pistacho es visto como un rubro con potencial, económico, especialmente en sectores áridos y semiáridos, aunque también tiene requerimientos agroclimáticos o ambientables bastante específicos que limitan su posible área de cultivo.

Pistachos a Europa

Aunque los chilenos han aumentado el consumo de pistacho, aún éste no se ha masificado como el maní, almendras o nueces. Incluso, la mayoría del pistacho que hoy se comercializa en el país es importado, a pesar de que existe una baja producción nacional. Cifras proporcionadas por Boletín Técnico Nº 1, señalan que la superficie plantada a nivel nacional alcanza las 61,2 hectáreas.

De ellas, sólo algunas plantaciones están en condiciones de cosechar, porque la mayoría se encuentran en vías de hacerlo en el corto plazo. En cuanto al rendimiento de las plantaciones adultas en secanos de buena calidad, el promedio mínimo del pistacho cosechado es de 1.500 Kg/ha (fruto en cáscara). En condiciones de regadío, esta producción debería superar ampliamente los 2.500 Kg/ha.

Con respecto a las exportaciones, Chile efectuó envíos por 75.241,7 kgs durante el año pasado, lo que significó retornos por un total de US$ 5.616.582 FOB, según datos proporcionados por ODEPA. Actualmente, los países que concentran el 79% de la producción mundial de pistachos son Irán y Estados Unidos, luego siguen Siria, China y Turquía, que en conjunto representan otro 18%. Esta mínima cantidad de competidores representaría una oportunidad para Chile, si es que se decide a entrar como productor y exportador al mercado internacional y nacional de este fruto.

Por último, el mercado del pistacho de mayor expansión en consumo es el europeo —Alemania, España y Holanda— que ha duplicado sus importaciones en los últimos 5 años.